Francis Ford Coppola REUTERS

Francis Ford Coppola está considerado hoy en día como un maestro del arte cinematográfico. Visionario e innovador, Coppola ha hecho suyo el concepto wagneriano de obra de arte total, donde nada se escapa a su atenta mirada de director y "a su empeño genuino por hacer cine de autor dentro de la maquinaria de los grandes estudios", a juicio de los especialistas.

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Su postura ha chocado, en ocasiones, con los intereses de la industria hollywoodiense, causándole problemas económicos y rodajes difíciles.

Renovador temático y formal, las exploraciones de Coppola en torno a las relaciones del poder y la corrupción y los horrores y el absurdo de la guerra han trascendido su obra artística, convirtiéndose en iconos colectivos y universales del imaginario y de la cultura contemporáneos. Con Fellini, Antonioni, Kurosawa y Murnau entre sus referencias, Coppola entró por la puerta grande del cine al ganar su primer Oscar al mejor guion original por Patton en 1970. No obstante, la película que encumbró su nombre fue El Padrino (1972), adaptación de la novela homónima de Mario Puzo, que, con un rodaje de 52 días y un reparto polémico, se convirtió en uno de los estrenos más taquilleros del momento, con la que obtuvo tres Oscar. Dos años después, rodó la secuela El Padrino II con un presupuesto que doblaba el de la anterior y por la que recibió numerosos reconocimientos, entre ellos, seis Oscar. Ese mismo año estrenó La conversación (1974), una de sus cintas más personales junto con Llueve sobre mi corazón (1969) y Tetro (2009), según los expertos. La década de los 70 culminó para Coppola con el estreno de Apocalypse Now (1979), una adaptación libre de la novela de Joseph Conrad El corazón de las tinieblas. El largometraje está incluido entre las grandes obras maestras del cine y en su momento fue de los de mayor presupuesto de su historia. En los 80 dirigió Rebeldes (1983), La ley de la Calle (1983) –que se convirtieron en cantera de una nueva generación de actores (su sobrino, Nicolas Cage, y su propia hija, Sofia Coppola, entre ellos)– y Peggy Sue se casó (1986). En los 90 estrenó El Padrino III (1990) y Drácula de Bram Stoker (1992), por la que consiguió tres Oscar. En 2001, presentó en el Festival de Cannes Apocalypse Now Redux, un nuevo montaje con 49 minutos de metraje inédito. Entre sus últimas cintas como director se encuentran El hombre sin edad (2007) y Twixt (2011).

Las películas de Francis Ford Coppola han sido nominadas y distinguidas, en numerosas ocasiones, con los más prestigiosos galardones internacionales de la industria del cine. Además de los premios de la Academia, los Globos de Oro (EE.UU.), la Palma de Oro de Cannes (Francia), los premios BAFTA (Reino Unido), los César (Francia), los David de Donatello (Italia) y el León de Oro (Italia) han reconocido sus trabajos en sus facetas como director, guionista y productor. En 2013 obtuvo el Praemium Imperiale (Japón).

Es un honor ser reconocido con el Premio Princesa de Asturias de la Artes. Lo acepto con gratitud, al tiempo que me doy cuenta de que, casualmente, estaba en mitad de la lectura de Don Quijote de la Mancha; así que, en palabras de Cervantes, “la ventura va guiando nuestras cosas mejor de lo que acertáramos a desear”. Gracias

Francis Ford Coppola

San Francisco, 6 de mayo de 2015

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